Discapacidad: Se entiende como una construcción simbólica, un término genérico y relacional que incluye condiciones de salud y déficits, limitaciones en la actividad, y restricciones en la participación. Este concepto indica los aspectos negativos de la interacción, entre un individuo y sus factores contextuales, considerando los ambientales y personales. (Concepto basado en la Clasificación Internacional de Funcionamiento, de la Discapacidad y de la Salud de la OMS).
Persona en situación de discapacidad: Es aquella que teniendo una o más deficiencias físicas, mentales, sea por causa psíquica o intelectual, o sensoriales, de carácter temporal o permanente, al interactuar con diversas barreras presentes en el entorno, ve impedida o restringida su participación plena y efectiva en la sociedad, en igualdad de condiciones con las demás. (Ley 20.422).
Se entiende la integración como la posibilidad de que un sujeto con una discapacidad se habilite para ejercer un rol protagónico, creativo e independiente en su vida y a nivel social, poniendo en juego su deseo y su capacidad de iniciativa y elección. Y agrega que “es importante que la integración sea posible, no como asimilación y pérdida de la particularidad sino como apropiación de un rol y un espacio social asumiendo la diferencia".
Varios autores expresan que lo que nos parece amenazante, distinto, diferente o lejano, nos molesta de gran manera, por ello hay quienes no se sienten tranquilos hasta que logran apartar a los sujetos e ubicarles en un espacio de sub-alternidad e inferioridad, excluyendole de toda participación social.